Los Secretos del Alma

Ya no estas solo en esta jaula oscura,
Tus pecados en el alma se retuercen sin fin,
Se alimentan de sueños rotos y de tu maldito ser,
Engaño y Deseo, tan adictivos como el vino carmesí.
Tu sangre se tiñe de este pecado en cada sorbo,
Y con él, un pedazo de tu alma se pierde.
Dentro de cada uno, crece ese hambre insaciable,
Y las almas se enferman por lo que esconden en silencio.No es maldad, dicen, sino un disfraz que vestimos,
Un fuego que consume y calcina hasta los huesos.
Pecados enterados bajo estrellas muertas,
Que nosotros mismos, su luz apagamos en los cielos.
Encerrados en jaulas que forjamos con cadenas,
Y las llaves perdidas por rincones sin verdades.
Lo que fue razón para vivir, se tornó adicción,
Una adicción que nos arrastra hacia el abismo atróz.Puedes correr, huir del fin, correrás lejos,
Pero al final, el destino te alcanzará sin piedad,
Tarde o temprano, tu mismo te juzgaras,
Y ante tu espejismo te encontraras de frente.
Mi bandera roja es tu bandera blanca,
Empapada en sangre de tu traición.
Las mentiras envenenan y queman nuestra piel,
Al fianal, somos meros prisioneros de lo que no queremos verCaímos en un vacío, donde la vida muere,
Una vida que se marchita, un letargo mortal,
Atados por mentiras que nunca duermen,
Esclavos de este casual ritual, llamado vida.
Ahora ve y dile al traidor de lengua afilada,
Al viajero que deambula sin su alma,
Que nada queda oculto bajo este cielo,
Y que el destino los llevara bajo el suelo.Puedes tirar piedras y esconder tu mano,
Trabajando en la sombra, dañando a tu hermano.
Que no hay rincón donde el pecado se oculte,
Pues la verdad, tarde o temprano, se sacude.
Al igual que el sol divide la noche,
Lo que envuelve la dulce mentira, saldrá con amargo reproche.
Puedes correr, puedes esconder tu rastro,
Pero el destino te atrapará, sin mucho gasto.